Escuela Linares de Casma apuesta por la eficiencia energética

sábado, 26 de mayo

(CEGA, mayo del 2012) Cuando en abril de 2008 la Escuela Rural Linares de Casma (Región de Los Lagos) ardió hasta los cimientos, era difícil imaginar que el nuevo edificio que se levantaría sobre sus cenizas sería tan distinto de su predecesor. De ser un establecimiento construido mayoritariamente en madera, con frecuentes problemas de pudrición y una calefacción en base a leña, este colegio pasó a ser un referente de construcción con alta inversión en tecnología, eficiencia energética, modernas instalaciones de tratamiento de aguas servidas y calefacción geotérmica. “Siempre hemos sido una escuela preocupada por el medio ambiente”, cuenta la directora de la escuela Marilita Leiva, “desarrollar la educación en armonía con el entorno natural es parte de nuestra misión educativa, y lo venimos haciendo hace años, desde antes de contar con este moderno edificio, que viene a reafirmar nuestra labor en ese sentido y que fue una apuesta del alcalde de hacer una gran inversión en este tema”, señala.

La escuela, dependiente de la municipalidad de Frutillar, atiende a unos 250 alumnos que provienen tanto de Casma como de sectores campesinos aledaños (Loma de la Piedra, Los Radales, Copihue, La Huacha, San Martín, La Radio, Colonia Ponce, Corte alto) y también de las ciudades de Purranque y Frutillar. El recinto, además, cuenta con un internado que atiende a  cerca de un 5% de la población educativa, lo que implica que el edificio presta atención a niños las 24 horas del día, convirtiendo el tema de la calefacción y la eficiencia en un tema clave: «Toda la calefacción del recinto funciona con bombas de calor geotérmicas, y el agua caliente del internado también. En la antigua escuela usábamos leña  y eso implicaba varios problemas más allá de la contaminación. El gasto que se hacía en ese combustible es mayor que el que se hace actualmente con el sistema geotérmico, además, para obtener un buen precio de leña, teníamos que comprar una vez para todo el año y eso implica otro problema: la bodega, esa leña hay que guardarla, tratar de que no se moje, lo que es muy difícil, y encima de todo, ese depósito llamaba a los ratones. Todo eso quedó en el pasado”, relata la directora durante una visita del CEGA al establecimiento. El recinto, de 3.400 m2, que cuenta con gimnasio, biblioteca, salas de computación y casino, mantiene una calefacción eficiente gracias a un sistema de aislación con termo paneles.

Las nuevas instalaciones del establecimiento se inauguraron para el año escolar 2011, en el mismo terreno de la antigua escuela. La obra aprovechó la temperatura del subsuelo de la zona, que en ese sector le brinda el agua a 12 ºC mediante pozos de 70 metros de profundidad. “Los costos de mantención de este sistema geotérmico son muy bajos, y la calidad muy buena. Algunas personas se han acercado a la escuela a preguntarnos por este sistema innovador de calefacción y se asustan un poco con el costo de la inversión inicial, pero eso es porque solo piensan en lo inmediato y no en los beneficios a largo plazo”, dice Leiva. Según empresas del rubro, una instalación de esta magnitud puede recuperar sus costos de inversión en aproximadamente dos años, debido al ahorro que se consigue operando con este sistema de calefacción.

El nuevo edificio de la Escuela Los Linares de Casma significó una inversión total que superó los 2.500 millones de pesos, y permitirá albergar a 250 alumnos, en 3.400 m2. Además de las salas de clase cuenta con un Gimnasio, casino, Biblioteca y sala de Computación, completamente habilitada con equipos audiovisuales. Fue construida en el mismo lugar que ocupaba el antiguo edificio, destruido totalmente por un incendio en abril de 2008.