Hidrogeóloga Linda Daniele y el secreto mundo del agua subterránea:“No sabemos lo que tenemos para armar un Plan B”
lunes, 18 de mayo
(CEGA, 18 de mayo 2020) Existen elementos claves sobre el ciclo del agua en Chile que no se conocen, porque no se ha estudiado suficiente lo que pasa a nivel subterráneo. ¿Cómo ocurre la recarga de los acuíferos que más usamos? ¿Qué tan antiguas son las aguas almacenadas en el subsuelo? A ciencia cierta, aún sabemos poco, y eso significa que la gestión del recurso hídrico en Chile se hace mucho más a ciegas de lo que quisiéramos reconocer, pues para mantener sistemas productivos de agua, necesitamos saber cómo ésta transita en superficie y en profundidad.
“Puede ser que Chile tenga agua almacenada en lugares donde no hemos ido a mirar”, dice la Dra. Linda Daniele, Hidrogeóloga del Departamento de Geología e investigadora del Centro de Excelencia en Geotermia de Los Andes, “Chile está lleno de fracturas y fallas, que pueden generar áreas propicias para la circulación de agua, pero ¿Cómo circula? Hay sistemas de fallas que son como esponjas de agua, otros que actúan de barrera al fluido, pero no sabemos los detalles de cómo es esa arquitectura oculta. Aún no sabemos lo que tenemos para armar un plan B”.
En marzo del 2020, Daniele y equipo cerrarán una primera etapa de investigación de este tema en la cuenca del Aconcagua, gracias a un Fondecyt que les ha permitido analizar el agua en la época actual junto al rol de la roca fracturada en la circulación de agua subterránea. Los resultados preliminares de este estudio desafían el tradicional concepto de recarga mayoritaria a través de los ríos, entregando mayor relevancia al rol de Los Andes en la recarga de las aguas de los acuíferos de la Depresión Central. “Chile es 75% montañoso, pero hasta ahora se ha estudiado muy poco el agua subterránea de esa zona, concentrándose en cambio en lo que vemos y usamos en la parte baja. Pero el origen de esas aguas está en lo alto, donde más llueve, y donde más intrincados son los laberintos del subsuelo”, concluye Daniele.
